Mostrando las entradas con la etiqueta The Guardian. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta The Guardian. Mostrar todas las entradas

miércoles, 21 de septiembre de 2016

Malvinas, los límites ante un posible acuerdo sobre los recursos naturales… @dealgunamanera,,,

 Malvinas, los límites ante un posible acuerdo sobre los recursos naturales…


  • El comunicado conjunto con el Reino Unido, presentado por la Ministra de Relaciones Exteriores argentina, Susana Malcorra, despertó el alerta en diferentes sectores políticos, incluso en parte del oficialismo.
  • La explotación de los recursos naturales es uno de los dos ejes principales del interés británico por las Islas, además de la ubicación estratégica.
  • El principal ingreso económico que obtiene el Gobierno Británico de las Islas Malvinas es el derivado de las Licencias de Pesca. Los barcos involucrados no cumplen ningún requisito ambiental, laboral ni de seguridad y no solo operan en el área que circunda a las Malvinas, sino que también se han registrado varios casos de pesca ilegal dentro de la Zona Económica Exclusiva Argentina.
  • En relación a la explotación de hidrocarburos, existe un alto riesgo de accidentes en una de las regiones con las condiciones meteorológicas y oleaje, más peligrosos del Planeta, y la dificultad logística de poder atender un siniestro.
  • La exploración y extracción de hidrocarburos debe ser suspendida, y la pesca debe ser afrontada por una nueva Comisión, cuyo principal objetivo sea asegurar la conservación de los recursos marinos.
© Escrito por Milko Schvartzman el martes 21/09/2016 y publicado por https://puntoverdeblog.net de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Como se preveía durante la campaña presidencial, el nuevo Gobierno Nacional replantearía las relaciones con el Reino Unido y abordaría de manera diferente el caso Malvinas. Un nuevo enfoque sobre uno de los tópicos que más profundo tocan a la sociedad Argentina, abriría las posibilidades de una nueva estrategia.

Durante los primeros años del kirchnerismo se intentó llevar adelante con el Reino Unido ciertos aspectos de común acuerdo, como la Comisión de Pesca del Atlántico Sur, la que luego de diferencias insalvables y decisiones unilaterales por parte del Gobierno de las Islas, fue disuelta.

Más tarde, durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, la Agenda de la cuestión Malvinas se manejó a través de una Secretaría de Estado específica, aunque fue objeto de muchas contradicciones: tal es el caso del ofrecimiento de vuelos directos a las islas, contrarrestado a los pocos días con la aplicación de un bloqueo a los barcos que realizaran actividades comerciales con las islas.

Existieron muchas curvas y contra curvas en los planteos, y el discurso se focalizó en acusaciones y ofensas, dirigido especialmente al público local. La misma retórica prevaleció desde Londres.

Los primeros indicios de una nueva política con respecto a Malvinas fueron mostrados en público por  la Ministra de Relaciones Exteriores, y encendieron el alerta de la sociedad y todos los sectores políticos, incluido el oficialismo, especialmente en lo que respecta a la explotación de los recursos naturales, uno de los dos ejes principales del interés británico por las Islas, además de la ubicación estratégica.

En un comunicado conjunto, los responsables de las relaciones exteriores de ambos países afirmaron que:

‘En este contexto se acordó adoptar las medidas apropiadas para remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas, incluyendo comercio, pesca, navegación e hidrocarburos.

Ambas Partes enfatizaron los beneficios de la cooperación y de un compromiso positivo de todos los involucrados. (Ver además la entrevista del matutino británico The Guardian: “Malcorra menciono que emprendimientos conjuntos entre ambos países sobre hidrocarburos eran “un asunto sensible a discutir y que podría tener sentido“)

La pesca y el ambiente marino.

El principal ingreso económico que obtiene el Gobierno Británico de las Islas Malvinas es el derivado de las Licencias de Pesca que otorga a más de 150 barcos coreanos, españoles y taiwaneses. Estas licencias de pesca se obtienen a través del pago de un canon que permite pescar en el área controlada por la Marina inglesa, alrededor de las Islas Malvinas, Orcadas y Sándwich del Sur.

Los barcos involucrados no cumplen ningún requisito ambiental, laboral ni de seguridad a la navegación y no solo operan en el área que circunda a las Malvinas, sino que también lo hacen en aguas internacionales, y se han registrado varios casos de pesca ilegal dentro de la Zona Económica Exclusiva Argentina (controlada por Argentina). Asimismo, muchos de los barcos que no son licenciados por el Gobierno de las Islas, y que pescan ingresando ilegalmente al Mar Argentino, luego suelen descargar en las Islas.

El programa de licencias de pesca no ha demostrado verdadero interés en la sostenibilidad de la explotación ni en las condiciones de vida de los tripulantes, los cuales son esclavizados y suelen saltar fuera de borda para escapar de las terribles condiciones a bordo.

El calamar Illex, una de las principales especies capturadas en la región, es el corazón del ecosistema marino, siendo alimento de mamíferos marinos, aves y especies de peces, la sobrepesca tiene impactos directos en todas las especies.

Sólo 7 observadores a bordo para más de 150 embarcaciones demuestran la falta de control de lo que ocurre en alta mar.

Explotación de hidrocarburos.

Argentina ha manifestado oficialmente como uno de sus argumentos más importantes en contra de la explotación de hidrocarburos por el Reino Unido, el hecho de los altos riesgos de accidentes en una de las regiones con las condiciones meteorológicas y oleaje, más peligrosos del Planeta, y la dificultad logística de poder atender un siniestro.

En caso de un accidente con hidrocarburos se vuelve casi imposible la correcta atención del mismo y los impactos en la región serían catastróficos para todo el ecosistema marino.

Ya en el pasado ha habido accidentes con derrames de hidrocarburos en bahías Malvinas, y los mismos no han podido ser atendidos apropiadamente, causando estragos en la vida marina ()
La quema de combustibles fósiles tiene un grave impacto global incidiendo en el cambio climático y se opone a los acuerdos de reducción de emisiones ratificados por Argentina.

¿Beneficio económico para quién?

El PBI per cápita de los isleños es uno de los más altos del planeta, mucho mayor aún que los habitantes del Reino Unido, no existe una necesidad de mejora económica para ellos, sino que cualquier beneficio económico y/o logístico que facilite la explotación de los recursos naturales implica una reducción de los costos del Reino Unido en el mantenimiento de sus colonias.

Es por esto que, la discusión de acuerdo con el Reino Unido, además de no presentar ninguna grieta a la disputa de soberanía, no debe implicar un impacto negativo para el medioambiente ni implicar riesgos de catástrofe ambiental.

La exploración y extracción de hidrocarburos debe ser suspendida, y la pesca debe ser afrontada por una nueva Comisión, cuyo principal objetivo sea asegurar la conservación de los recursos marinos, reduciendo la flota, transparentando toda la información de los barcos y capturas, e implementando el Código de Conducta para la pesca Responsable de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) a través de observadores independientes.



domingo, 27 de septiembre de 2015

Efecto Bergoglio: Argentino y Soldado de Dios... @dealgunamanera...

Argentino y soldado de Dios…
                                            
Francisco ofició una misa en Filadelfia.

Por primera vez, la notable ensayista analiza lo que representa Francisco, a propósito de su histórico viaje a Cuba y Estados Unidos.

En julio pasado, Naomi Klein fue invitada por el Vaticano a una conferencia internacional sobre la encíclica Laudato Si’, cuyo tema era el cambio climático. Esta pensadora radical, capitana de las luchas antiglobalización, que jamás atenuó su rechazo a los discursos cocinados en los hornos del poder, quedó tan contenta que ella misma debe sentirse transfigurada. Su crónica vaticana apareció en New Yorker (revista que aquí se recuerda por la nota que le hizo a Cristina sobre Nisman).

En la ronda de presentaciones de los asistentes, a Naomi Klein le tocó ser “una feminista judía secular” (es decir, un animal de otro rodeo). Pero la composición de los rodeos vaticanos ha cambiado mucho. La apertura corrió a cargo de un obispo africano, que subrayó: lo que discutiremos no lo suscita un papa, sino que “es parte de la tradición católica, que considera a la Tierra como un sacramento”. Aquellos a quienes la palabra “sacramento” nos resulta ajena, entre otras razones por su raíz en “sacer, sagrado”, ¿cómo traducimos?

Naomi Klein encontró una solución. Se apoya (¡ella!) en una afirmación de la encíclica: “En la Biblia no hay lugar para el antropocentrismo, que no se preocupa por el resto de las creaturas”. Y Klein avanza: Francisco está corrigiendo siglos de una teología que consideró al mundo natural con hostilidad o, incluso, como una tentación que debe ser vencida. El Papa nos devuelve al santo de Asís. Los que no lo recuerden bien, a causa de una pobre formación religiosa, como es mi caso, pueden leer Los motivos del lobo, el poema de Rubén Darío, o ver Francisco, juglar de Dios, la formidable película del católico Roberto Rossellini.

Con mayor sensatez que la entusiasmada Naomi, en The New York Review, el especialista Bill McKibben compara las ideas de Francisco con los primeros teóricos, entonces solitarios, de una perspectiva como la que ahora adopta la Iglesia. Sobre todo, E.F. Schumacher, autor de un libro de los años 70: Lo pequeño es hermoso. Schumacher fue pasado por alto en el escrito papal, porque la Iglesia selecciona sus fuentes. Sin embargo, la crítica ecológica, moral, social, económica y espiritual coloca a Francisco en una línea de pensadores que lo precedieron. Escribe McKibben: “Una larga fila de gurús, de los cuales Francisco es el último, converge hoy con un gran número de científicos que, en lugar de consultar las Sagradas Escrituras, consultan sus modelos digitalizados, pero los dos saberes parecen estar llegando al mismo punto”.

Hay una historia laica anterior a la historia eclesiástica. Las citas de la Biblia no son autoridad para muchos. Quienes consideran como una liberación la desacralización del mundo, quienes todos los días deben volver a pensar el fundamento de sus valores porque no tienen un soporte exterior a los seres humanos, ¿qué hacemos?

Cuba libre

Antes del tour estadounidense que hoy culmina, Francisco estuvo en Cuba, adonde lo condujeron motivos políticos bien actuales: fortalecer el puente La Habana-Washington, tarea a la que Obama lo comprometió, como figura de prestigio en el mundo católico norteamericano, donde ese acuerdo no iba a ser recibido con el mismo alborozo con que fue recibido en La Habana. El lobby cubano anticastrista de Miami y sus representantes políticos en el Partido Republicano sintieron que se los pasaba por alto.

Negociadores de ambas partes visitaron el Vaticano antes de que se conocieran la fecha y el contenido del restablecimiento de relaciones y el (futuro, progresivo, lento) levantamiento del embargo. El Papa estaba al día, por razones de política interior estadounidense, no simplemente como prueba del respeto que, sin duda, le tiene Obama.

En Estados Unidos, todos los presidentes ponen de manifiesto su fe religiosa. Culturalmente, Obama no siente ningún forzamiento en sus honras al Papa, como podría experimentarlo, para dar un ejemplo, un presidente francés. Lo sentiría si la magnífica recepción en Washington lo encaminara en un sentido contrario a los intereses que él considera los de su nación. Pero, justamente en esta coyuntura mundial, varias soluciones que Obama quiere que sean la herencia final de su gobierno van en el mismo sentido que los deseos vaticanos.

Después de la misa en La Habana, diarios europeos importantes como The Guardian y Le Monde le dieron más lugar en sus tapas a la victoria de Tsipras en Grecia que a la gira papal. A pie de portada, Le Monde informa: “En Cuba el Papa encuentra a Fidel Castro pero no a los disidentes”. España se ha vuelto un país laico y El País sólo trae en tapa la misma noticia. Por supuesto, el Papa no figura en diarios de esas regiones de las que se habla todo el tiempo: no hay noticias en China y, si vamos al caso, tampoco en Canadá ni en Australia.

El gran intelectual disidente cubano Manuel Cuesta Morúa publicó el jueves en El País una nota que vale la pena citar. Considera que el Papa debió haber recibido por lo menos a las Damas de Blanco, que representan “el doble resumen en Cuba de todas las fragilidades: las de la mujer, las de los hijos, las de la pobreza y las de la marginación de las diferencias en el límite de todas las violencias de Estado”. Y hace una conjetura: “La misión política de la Iglesia en Cuba y del Vaticano actual queda así en claro: el juego offshore en la frontera entre Estados Unidos y Cuba. El peligro, en términos de modernización plural del espacio público, es el de un nuevo pacto Iglesia-Estado para el reparto asimétrico de la sociedad cubana en parcelas espirituales que cooperan entre sí y se refuerzan mutuamente”.

Amargo escepticismo siente Cuesta Morúa. Los argentinos podríamos imaginar una visita papal durante un gobierno autoritario, en cuyo transcurso el visitante ilustre no hubiera recibido a alguna organización de derechos humanos, la más discreta y menos política, por la sencilla razón que dio Francisco: “Estaba de visita en un país”. Raúl Castro invitó a un hombre que puede entender el régimen cubano, aunque no aprobarlo. El Papa, como Obama, tiene objetivos.


En el corazón de Moloch. El miércoles, en Washington, el Papa canonizó a Junípero Serra. Representantes de pueblos originarios de California le habían escrito, antes de que Francisco diera el paso definitivo, para explicarle que ese cura franciscano del siglo XVIII no tuvo en cuenta, en su tarea evangelizadora, ni el bienestar ni, en muchos casos, la vida de sus antepasados, de los pueblos originarios. Una dirigente de los grupos que se opusieron le recetó al Papa una dosis de su propia medicina: “La gente dice que era un hombre de su tiempo, que ésa era la forma en la que se hacían las cosas cuando Junípero estuvo aquí. Pero como cura, no importa en qué época, se supone que tendría que preocuparse por la gente”.

Otro tipo de choque cultural le presentó a Francisco la lista de invitados con los que Obama pobló los jardines de la Casa Blanca para agasajarlo. Incluía representantes de organizaciones LGTB y partidarios de la libertad de decisión sobre el aborto. El Washington Post tituló su nota de este modo: “La lista de invitados a la Casa Blanca molestó a algunos conservadores”. Sin embargo, Francisco estaba preparado, por sus intervenciones anteriores sobre el perdón y la aceptación de los diferentes y los “equivocados”, para mirar con piedad benévola esta variedad. Es un político que no va a armar un lío por algunos cientos de incluidos en una lista de miles de asistentes a una recepción en la Casa Blanca. No se conduce como una celebrity en una kermés mundana.


El jueves, ante el Congreso de Estados Unidos, Francisco elogió la inmigración y recibió aplausos. Recordó que esos inmigrantes llegaron a una tierra habitada por gente cuyos derechos “trágicamente” no fueron respetados (es decir, los que evangelizó el recién canonizado Junípero). De pronto, bomba: el Papa le habla a la derecha local, exigiéndole el respeto y la acogida de los extranjeros. Francisco hizo llorar hasta a un curtido representante de los republicanos, de fe católica. También solicitó la abolición de la pena de muerte, que conservan más de treinta estados norteamericanos y, en Texas, es posible que sea ejecutado un argentino.

Casi todos los diarios europeos, excepto los muy conservadores o los confesionales como La Croix, mostraban más interés por el escándalo de la Volkswagen que por Francisco. Por el contrario, el Papa sigue floreciendo en los diarios norteamericanos y latinoamericanos. El jueves, la tapa del New York Times trajo una hermosa foto de Obama y el Papa, de espaldas; la cobertura es unánime. La foto del Washington Post es digna de los oros vaticanos: una toma en picado de la descomunal iglesia que recibió a Francisco, con sus bóvedas, frescos y columnas, en un alarde de perfección óptica y buen encuadre.


En Nueva York, la asamblea de las Naciones Unidas escuchó el llamado a la paz y la justicia: “Dar a cada uno lo suyo, siguiendo la definición clásica de justicia, significa que ningún individuo o grupo humano se puede considerar omnipotente, autorizado a pasar por encima de la dignidad y de los derechos de las otras personas singulares o de sus agrupaciones sociales”. Esta frase acerca a un liberal democrático a la oratoria vaticana; y las referencias a la “base mínima” indispensable para la “dignidad” incorporan a progresistas de varios estilos. Los admiradores de José Hernández, por su parte, agradecen los cuatro versos del Martín Fierro citados por el Papa, cuyos octosílabos seguramente resonaron por primera vez en la ONU.    

Después, fue la apoteosis en los barrios pobres, por las calles y en escuelas donde los niños le hacen preguntas al visitante y le muestran sus manualidades digitales. Francisco parecía disfrutarlo más que los integrantes de los servicios de seguridad que trabajaron como comandos de la Segunda Guerra.

En la tarde del viernes, el tour neoyorquino culminó en el Madison Square Garden, estadio donde cantaron todos los grandes (nombro sólo tres: Sinatra, Lennon y los Rolling). El Papa entiende perfectamente la lógica de la comunicación contemporánea.

Ayer, Filadelfia. Y hoy, domingo, misa de despedida al aire libre. Lo milagroso de este hombre es que aguanta más que las estrellas del rock. Lleva en sus oídos los rumores de otras plazas multitudinarias. Es el jefe de una religión, pero tiene también un pasado: fue peronista y populista, rasgos que, gobernados por la inteligencia política, son pertrechos de un soldado de Dios.

Muy lejos de la trabajosa teología de Joseph Ratzinger, su antecesor, el jesuita Bergoglio se entrenó con los Ejercicios espirituales de San Ignacio, un método paso a paso para arribar a una decisión sobre las preguntas para las que el sujeto necesita una respuesta. Tiene, además, la astucia para hablar como si no hubiera recibido el poder del que está investido; demuestra suprema habilidad para no dejarse triturar por los engranajes de una ingeniería tan complicada y llena de trampas como la del Vaticano. No se distrae de sus objetivos.

Es un jesuita, que milita al servicio de Dios y de la Iglesia. Ha mostrado las cualidades necesarias: ternura exterior y temple de acero. 


© Escrito por Beatriz Sarlo el domingo 27/09/2015 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

  

martes, 1 de enero de 2013

Abel González, Ombudsman…De Alguna Manera...


Abel González, Ombudsman…

EL PRIMER ombudsman periodístico de la Argentina, el maestro Abel González, en 1998 con PERFIL.

Murió el primer ombudsman de un medio argentino. A los 81 años, el maestro de periodistas Abel González se fue enojado y cansado con lo que sucede en nuestra profesión. Frustrado al ver que el camino que abrió con los ombudsmen periodísticos en 1998 en PERFIL no prendió.

¿Cuántas noches recientes habrá pensado cómo habrían sido distintas las coberturas de Clarín y en menor medida de La Nación sobre la guerra entre el Gobierno y Clarín si estos dos diarios hubieran contado con un ombudsman? ¿O con cuánta más autoridad se habrían defendido de las acusaciones de ser medios hegemónicos?

Hay que confesar que tampoco PERFIL logró que el ombudsman obtuviera el alcance que consiguió esa posición en las redacciones de otros países. Son múltiples las causas, y están bien explicadas en el trabajo de Flavia Pauwels titulado “El defensor del lector, ese gran ausente de los medios argentinos” (que se puede leer en www.saladeprensa.org/art593.htm). Y en el texto del propio Abel González titulado “La autopsia periodística para explicar por qué no funcionó” (que se puede leer en http://e.perfil.com/analisis-cierre). Personalmente agrego que también existen trabas culturales en el interior de las redacciones remisas a aceptar críticas internas, atribuibles a una mal entendida defensa corporativa y hasta sindical.

Abel González fue jefe de Redacción primero y director después de la revista Siete Días en su época dorada, en los años 70, y jefe de Información General del diario Clarín en los 80, además de subdirector de la revista La Semana y prosecretario general de Redacción del diario La Razón, cuando lo dirigió Jacobo Timerman, y recibió el premio Al Maestro con Cariño como profesor de periodismo en TEA.

La desaparición de Abel González nos recuerda las deudas de autocrítica que aún tenemos con los lectores, y es una buena oportunidad para anticipar que a partir de febrero próximo Andrew Graham-Yooll, otro maestro de redacciones (periodista de los diarios ingleses The Daily Telegraph y The Guardian, profesor visitante de la Universidad de Londres y de la Universidad de Cambridge y director del Buenos Aires Herald), tras cinco años como actual ombudsman de PERFIL, cumplirá su mandato.

El próximo ombudsman será Julio Petrarca, actual editor jefe de este diario desde su relanzamiento, en 2005, y quien anteriormente fue secretario de Redacción de la revista La Semana, prosecretario general de Redacción del diario La Razón durante las gestiones de Jacobo Timerman y Carlos Juvenal, director editorial de la revista La Maga y veinte años profesor de Periodismo en TEA. Andrew, a su vez, había sucedido a Nelson Castro, ombudsman de PERFIL de 2005 a 2007.

A partir de febrero, Petrarca escribirá una columna en la que se criticará al propio diario PERFIL, retomando el modelo de la época de Abel González de un único texto semanal, pero más extenso. Y siguiendo el modelo del primer diario inglés que tuvo ombudsman, The Guardian, irá frente a las cartas de los lectores pero no habrá respuestas a ellas de Petrarca como sí las hubo durante la gestión de Nelson Castro y las hay en la de Graham-Yooll. Justamente el ombudsman de The Guardian, Ian Mayes, cuando visitó la Argentina siendo presidente de la ONO (Organization of News Ombudsmen, invitado por Fopea –Foro de Periodismo Argentino–), dos años antes de la sanción de la Ley de Medios, se anticipó a lo que sería la batalla cultural entre el Gobierno y el periodismo. Se preguntó: “Si las organizaciones periodísticas están pidiendo que todos rindan cuentas, ¿por qué los periodistas no deberían hacerlo?”. Su receta era crear más ombudsmen, y remarcaba que de los veinte mil medios de comunicación de entonces, sólo ochenta tenían ombudsman. Desde 2006, la cantidad de ombudsmen en el mundo ha aumentado pero no significativamente.

En su visita, Mayes también expuso en Adepa, donde sostuvo que “hace falta educar sobre esta figura y el servicio público que significa el ombudsman”. Pasaron seis años y los medios perdieron la gran oportunidad de construir otro capital simbólico que tan útil habría sido frente a la campaña de desprestigio a la que fueron sometidos.

Y Mayes advertía: “El ombudsman no debe ser una función cosmética o de relaciones públicas; de lo que se trata es de mostrar respeto por el lector”. Respeto que requiere, más allá de responder las cartas, ser más severamente autocríticos.

El mejor homenaje que podremos hacerle a Abel González será continuar aquel camino por él abierto en 1998.

© Escrito por Jorge Fontevecchia y publicado en el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el viernes 28 de Diciembre de 2012.



lunes, 16 de abril de 2012

Sergey Brin de Google... De Alguna Manera...

Para uno de los fundadores de Google, la libertad de la web está más amenazada que nunca...

  La libertad de internet está amenazada, según Sergey Brin cofundador de Google. (AP)

En una entrevista, Sergey Brin apuntó contra los gobiernos que pretenden controlar la información, pero también contra Facebook y Apple por el control del software que puede usarse en sus plataformas. "Da miedo", afirmó.

La libertad que rige en Internet está bajo la mayor amenaza desde su creación hace tres décadas, según advirtió Sergey Brin, uno de los fundadores de Google, en una entrevista en la que, además, apuntó por esa amenaza no solo a los gobiernos que intentan controlar la información –un clásico de ese tipo de advertencias- sino también y abiertamente a los gigantes Facebook y Apple.

En la entrevista, publicada hoy por el diario inglés The Guardian, Brin sostiene que esas "fuerzas muy poderosas" se alinearon contra la apertura que ofrece la red. Dice que está más preocupado que nunca y que "da miedo" pensar en la actual situación.
 
El fundador de Google afirmó que la amenaza contra la libertad en Internet procede de los gobiernos que buscan controlar el acceso y las comunicaciones de los ciudadanos pero también de Facebook o Apple, que controlan el software que se pueden utilizar en sus plataformas. Según dijo, él y Larry Page no habrían podido crear el famoso buscador si Internet hubiera estado entonces dominado por Facebook debido a que hay "que jugar con sus reglas, que son realmente restrictivas".

 Brin, de 38 años, es considerado como la principal fuerza detrás de la parcial retirada del buscador de China en el año 2010 debido a la preocupación por la censura en ese país y ya antes cuestionó los esfuerzos de países como Arabia Saudita o Irán por restringir el uso del Internet. Según "The Guardian", sus críticas a Facebook pueden resultar controvertidas puesto que la red social está cerca de entrar a cotizar en bolsa por un valor estimado en alrededor de 76 mil millones de euros.

La advertencia de Brin llega luego de que se conociera un proyecto del gobierno británico para vigilar las llamadas telefónicas, los mensajes de texto y los correos electrónicos por razones de seguridad. La iniciativa que el primer ministro David Cameron planea presentar ante el Parlamento propone que el centro de escuchas de Cheltenham (oeste de Inglaterra), conocido por sus siglas GCHQ y cuyas actividades son secretas, guarde información sobre la hora y la duración de cada llamada telefónica, así como los destinatarios de correos electrónicos y mensajes de texto.

© Agencia EFE y publicado en el Suplemento iEco de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el lunes 16 de Abril de 2012.